Ventanas
La propuesta que realizan las ventanas de aluminio, marcaron un hito en el mundo del diseño y la decoración de los hogares u otros espacios. Atrás quedó el clásico modelo de ventanas de madera y se le dio prioridad a un concepto que hasta el sol de hoy brinda otra forma de entender la estética del cristal y la iluminación.
Lo primero que hay que definir sobre las características de este tipo de ventanas, es que el aluminio es un material liviano, lo que hace mucho más ligera la estructura de la ventana, a diferencia de lo que se logra con una provista de madera.
Este aluminio se presenta como un elemento resistente, con un sistema que deja en su interior un vacío, favoreciendo aún más a que su peso sea mucho más inferior. El cristal por su parte, se sostiene entre dos placas de aluminio y una banda de plástico, como si el vidrio fuese mordido a presión.
Todo esto hace que la estructura de la ventana sea fácil de manejar, favoreciendo el abrir y el cerrar, gracias a lo que se podría denominar como un sistema de un riel o dos rieles, que facilitan el movimiento de la ventana de un lado al otro.
Algunas características de las ventanas de aluminio: ambientalmente amigables; amplia gama de colores; alto rendimiento térmico; constantemente estable todo el año; aspecto flexible y versátil; vida útil excepcional.